Un sistema de climatización, cuando llegan los meses de verano a las ciudades de interior, más que un lujo, es algo de primera necesidad. Por ello, es normal que lo acabemos teniendo todo el día encendido y que, como es evidente, la factura de la luz se dispare. Así que, puestos a tener uno de estos aparatos instalados en casa, lo mejor es elegir el que menos gaste. En este sentido, los equipos de aire acondicionado de tipo Inverter ofrecen muchas ventajas respecto a los tradicionales.
¿Por qué los sistemas Inverter gastan menos energía que los tradicionales?
La respuesta a esta pregunta es muy sencilla y se encuentra en el compresor o motor del equipo, el cual, en el caso de los Inverter, se detiene al llegar a la temperatura que hemos establecido mientras que, en los tradicionales, sigue funcionando todo el tiempo. Por ejemplo, piensa que, al llegar a casa, hace una temperatura superior a los 30º. Pones el termostato a 25º y dicho compresor empieza a trabajar al máximo de su capacidad hasta que la estancia alcanza este valor y se para. Sin embargo, en cuanto sube, vuelve a arrancar para descenderla.
¿Por qué ahorra más un sistema Inverter que uno convencional?
El motivo se encuentra en que los sistemas de aire acondicionado Inverter son capaces de controlar la frecuencia de la corriente eléctrica mediante una placa electrónica. Piensa que a tu casa la electricidad llega a entre 50 y 60 hz y que, si por las necesidades del momento, el compresor solo necesitase de 5 hz, el resto se estaría desaprovechando. Por tanto, este circuito permite variar la velocidad de funcionamiento del motor según la situación y, así, reducir el gasto eléctrico.
Además, de esta forma, el compresor no tiene que realizar tantos arranques y paradas algo que, además de permitirte ahorrar entre un 30 y un 60% de energía, alargará su vida útil. Utilizando el mismo ejemplo que en el apartado anterior, podemos decir que, en el momento en el que el sistema de aire acondicionado consiga que la estancia se sitúe a una temperatura cercana a los 25º, el compresor irá reduciendo progresivamente su velocidad hasta funcionar a un 10% de su capacidad.
Otra de las grandes ventajas de los equipos de aire acondicionado Inverter es el nivel de emisión de ruidos, el cual es mucho más bajo que el de los tradicionales. Este hecho va ligado, de forma directa, con lo comentado en los dos párrafos anteriores ya que, al bajar su rendimiento, también provoca menos vibraciones y ocasiona que los materiales no se dilaten tan rápidamente.
En definitiva, el único inconveniente de los sistemas de aire acondicionado Inverter es que son más caros que los tradicionales. Sin embargo, puedes estar seguro que, debido al precio en el que está la electricidad en estos momentos, amortizarás la inversión en unos pocos meses.